Todos los que obtengan calor de la frialdad de otros, valor de su claudicación y lealtad de su traición, triunfarán con el mensaje del tercer ángel.
El ángel representado en la profecía proclamando este mensaje, simboliza una clase de hombres fieles, quienes obedientes a los llamados del Espíritu de Dios y a las enseñanzas de su Palabra, proclaman esta amonestación a los habitantes de la tierra.
La justificación por la fe…es el mensaje del tercer ángel en verdad.
Toda verdadera reforma tiene su lugar en la obra del mensaje del tercer ángel.
Si el mensaje del tercer ángel fuera proclamado en todos sus aspectos a muchos de los que ocupan el puesto de maestros, no lo comprenderían."...
En un sentido en especial, los adventistas del séptimo día han sido puestos en el mundo como centinelas y transmisores de luz. A ellos ha sido confiada la tarea de dirigir la última amonestación a un mundo que perece. La Palabra de Dios proyecta sobre ellos una luz maravillosa. Una obra de la mayor importancia les ha sido confiada: Proclamar los mensajes del primero, segundo y tercer ángeles. Ninguna otra obra puede ser comparada con ésta y nada debe desviar nuestra atención de ella. Las verdades que debemos proclamar al mundo son las más solemnes que jamás hayan sido dadas a seres mortales. Nuestra tarea consiste en proclamarlas.
Proclamad el mensaje del tercer ángel de manera que sea oído por el mundo entero.
El mensaje del tercer ángel debe ser presentado como la única esperanza para la salvación del mundo que perece.
El tema de mayor importancia es el mensaje del tercer ángel que abarca los mensajes del primero y segundo ángeles. Todos deben entender las verdades contenidas en estos mensajes y demostrarlos en la vida diaria, porque esto es esencial para la salvación.
Como pueblo nos encontramos en peligro de dar el mensaje del tercer ángel de una manera tan indefinida que no impresione a la gente. Nuestro mensaje es un mensaje de vida y muerte, y debemos permitir que este mensaje aparezca como es: el gran poder de Dios. Entonces el Señor lo hará eficaz. Hemos de presentarlo con toda su fuerza notable
El mensaje de tercer ángel no será comprendido, la luz que alumbrará toda la tierra con su gloria será llamada una falsa luz, por aquellos que rehúsen caminar en su gloria progresiva.
El mensaje del tercer ángel será proclamado, y aquellos que no avancen con él en conocimiento y consagración serán dejados de lado.
El mensaje del tercer ángel ha de iluminar la tierra con su gloria; pero sólo a aquellos que han resistido a la tentación en el poder del Poderoso se les permitirá que tomen parte en la proclamación de él cuando crecerá hasta formar un fuerte clamor.
Las almas que buscan fervientemente la luz y aceptan con regocijo cada rayo luminoso proveniente de su Santa Palabra, son las únicas a quienes se les concederá luz. Será a través de estas almas como Dios revelará la luz y el poder que alumbrarán toda la tierra con su gloria.
A ninguna voz se le debiera impedir proclamar el mensaje del tercer ángel.
Algunos se han apartado del mensaje de la justificación por la fe para criticar a los hombres… El mensaje del tercer ángel no será comprendido, la luz que brillará sobre la tierra con su gloria será llamada falsa luz por aquellos que renuncian a andar en su creciente gloria. El trabajo que podía haberse hecho será dejado sin hacer por los que rechacen la verdad a causa de su descreimiento. Os urgimos a vosotros que os oponéis a la luz de la verdad, que os apartéis del camino del pueblo de Dios.
La más terrible amenaza jamás dirigida a los mortales está contenida en el mensaje del tercer ángel.
Los tres ángeles de Apocalipsis 14 representa al pueblo que acepta la luz de los mensajes de Dios, y salen como agentes suyos para pregonar las amonestaciones por toda la anchura y longitud de la tierra.
Los ángeles son representados volando en medio del cielo mientras proclaman al mundo un mensaje de amonestación, un mensaje que tiene relación directa con la gente que vive en los últimos días de la historia de esta tierra. Nadie escucha la voz de estos ángeles, porque son símbolos que representan al pueblo de Dios que está trabajando en armonía con el universo del cielo. Hombres y mujeres, iluminados por el Espíritu de Dios, santificados por la verdad, proclaman los tres mensajes en su orden.
En la Palabra de Dios se nos muestran las consecuencias que tiene la proclamación del mensaje del tercer ángel. "Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo" (Apocalipsis 12:17). La negativa a obedecer los mandamientos de Dios, y la resolución de albergar odio contra los que proclaman estos mandamientos, lleva a la guerra más resuelta de parte del dragón, cuyas energías enteras se dedican a oponerse al pueblo de Dios que guarda los mandamientos.
Por la falta de celo en la promulgación del mensaje del tercer ángel, muchos otros, aunque no aparentan vivir en transgresión, de todos modos están ejerciendo su influencia en favor de Satanás tan seguramente como aquellos que abiertamente pecan contra Dios.
El tiempo es breve. El mensaje del primer, segundo y tercer ángel son los mensajes que deben ser proclamados al mundo. No podemos escuchar literalmente a esos tres ángeles, pero estos ángeles de Apocalipsis representan un pueblo que estará en la tierra y predicará estos mensajes.
En nuestra obra debe dedicarse más atención a la reforma a favor de la temperancia. Todo deber que exige reforma entraña arrepentimiento, fe y obediencia. Significa elevar el alma a una vida nueva y más noble. De modo que toda verdadera reforma tiene su lugar en la obra del mensaje del tercer ángel. Especialmente la obra en la temperancia exige nuestra atención.
Conforme vaya acercándose la tempestad, muchos que profesaron creer en el mensaje del tercer ángel, pero que no fueron santificados por la obediencia a la verdad, abandonarán su fe, e irán a engrosar las filas de la oposición.
Juan fue enviado en el espíritu y el poder de Elías a fin de que preparase el camino para Jesús. Los que rechazaron el testimonio de Juan no recibieron beneficio de las enseñanzas de Jesús. Su oposición al mensaje que había predicho la venida de él los colocó donde no les era fácil recibir las evidencias más categóricas de que era el Mesías. Satanás indujo a aquellos que habían rechazado el mensaje de Juan a que fuesen aún más lejos, a saber, que rechazasen y crucificasen a Cristo. Al obrar así, se situaron donde no pudieron recibir la bendición de Pentecostés, que les habría enseñado el camino al santuario celestial. (…) Todo el cielo observó con el más profundo interés la recepción otorgada al mensaje del primer ángel. Pero muchos que profesaban amar a Jesús, y que derramaban lágrimas al leer la historia de la cruz, se burlaron de las buenas nuevas de su venida. En vez de recibir el mensaje con alegría, declararon que era un engaño. Aborrecieron a aquellos que amaban su aparición y los expulsaron de las iglesias. Los que rechazaron el primer mensaje no pudieron recibir beneficio del segundo; tampoco pudo beneficiarles el clamor de media noche, que había de prepararlos para entrar con Jesús por la fe en el lugar santísimo del santuario celestial. Y por haber rechazado los dos mensajes anteriores, entenebrecieron de tal manera su entendimiento que no pueden ver luz alguna en el mensaje del tercer ángel, que muestra el camino que lleva al lugar santísimo. Vi que así como los judíos crucificaron a Jesús, las iglesias nominales han crucificado estos mensajes y por lo tanto no tienen conocimiento del camino que lleva al santísimo, ni pueden ser beneficiados por la intercesión que Jesús realiza allí.
Vi que Dios tiene hijos sinceros entre los adventistas nominales y las iglesias caídas, y antes que sean derramadas las plagas, los ministros y la gente serán invitados a salir de esas iglesias y recibirán gustosamente la verdad. Satanás lo sabe; y antes que se dé el fuerte pregón del tercer ángel, despierta excitación en aquellas organizaciones religiosas, a fin de que los que rechazaron la verdad piensen que Dios los acompaña. Satanás espera engañar a los sinceros e inducirlos a creer que Dios sigue obrando en favor de las iglesias. Pero la luz resplandecerá, y todos los que tengan corazón sincero dejarán a las iglesias caídas, y se decidirán por el remanente.