Los males de afuera despertarán males de dentro.
Satanás busca continuamente influir sobre las mentes humanas mediante sus artes sutiles.
O los ángeles malos o los ángeles de Dios controlan las mentes de los hombres. Entregamos nuestras mentes al control de Dios o al control de los poderes de las tinieblas; y será bueno que nos preguntemos dónde estamos parados hoy -si bajo el estandarte ensangrentado del Príncipe Emanuel o bajo la bandera negra de los poderes de las tinieblas.
La mente tiene que entrar en conflicto espiritual (…) Todos los hábitos deben ser puestos bajo el control de Dios.
La única seguridad para el alma consiste en pensar bien.
La energía eléctrica del cerebro, aumentada por la actividad cerebral, vitaliza todo el organismo, y es de ayuda inapreciable para resistir la enfermedad.
Los nervios del cerebro, que conectan todo el organismo, constituyen el medio por el cual el cielo se comunica con el hombre y afecta la vida íntima. Todo lo que perturbe la circulación de la corriente eléctrica en el sistema nervioso, debilitando así las facultades vitales y disminuyendo la sensibilidad mental, dificulta la tarea de despertar la naturaleza moral.
Cada órgano del cuerpo fue hecho para servir a la mente.
El sistema es vigorizado por la fuerza eléctrica del cerebro para resistir la enfermedad.
La mente se estrecha y atrofia por su afición a acumular dinero.
El estudio diligente no es la principal causa del deterioro del poder de la mente. La causa principal es la dieta inadecuada, las comidas irregulares, y la falta de ejercicio. Las horas irregulares para comer y dormir agotan las fuerzas del cerebro.
La influencia de Satanás se ejerce constantemente sobre los hombres para controlar los sentidos, dominar la mente para el mal e incitar a la violencia y al crimen. El debilita el cuerpo, obscurece el intelecto y degrada el alma. Siempre que los hombres rechacen la invitación del Salvador, se entregan a Satanás. En toda ramificación de la vida, en el hogar, en los negocios y aun en la iglesia, son multitudes los que están haciendo esto hoy.
Cada indulgencia en el pecado debilita el alma; y abre la puerta para que Satanás entre y tome el control de la mente, haciendo del individuo su siervo efectivo.
La mente se educa en la familiaridad con el pecado.
El corazón debe ser fielmente vigilado, o males de afuera despertarán males de adentro, y el alma vagará en tinieblas.
El corazón se corrompe por la imaginación.
La batalla es entre la verdad y el amor al mundo. ¿Quién obtendrá la victoria? Se esforzarán para que Jesús cautive su corazón, o permitirán que Satanás controle su mente y expulse el amor a la verdad y que los ángeles reciban la orden, `Se han unido a los ídolos, apartaos de ellos.´
Los ángeles malvados o los ángeles de Dios, influyen en las mentes de los hombres.